martes, 26 de octubre de 2010

La Antártida esconde una cordillera del tamaño de los Alpes


La gran capa de hielo que cubre el continente antártico alcanza tales magnitudes que llega a cubrir una cordillera con cumbres y valles similares a las de los Alpes, con más de 4.000 metros de profundidad.

Al menos, eso asegura un equipo internacional de científicos que no sólo ha verificado la existencia de esta cordillera montañosa oculta bajo la Antártida, sino que además ha hecho posible recrear en imágenes virtuales que un accidentado paisaje descansa bajo espesores de varios kilómetros de hielo.

Esta cordillera explicaría la formación de la gran capa de hielo del Este de la Antártida. Pese a que ya fue localizada hace 50 años por científicos rusos y bautizada como cordillera Gamburtsev, nadie imaginaba que fuese comparable en tamaño y desniveles a los Alpes. “Hemos podido saber no sólo que se trata de montañas del tamaño de los Alpes europeos sino que tienen además cumbres y valles similares”, explicaron los científicos del British Antartic Survey (BAS). Pero sobre todo, estos hallazgos muestran la descomunal magnitud que puede llegar a abarcar la capa de hielo que cubre la Antártida.

Se está especulando el papel de esta cordillera oculta bajo el hielo en el surgimiento de la gran capa de hielo del este antártico, que cubre más de 10 millones de kilómetros (20 veces España) sobre el lecho continental.

Según los geólogos, si esta corteza de hielo hubiera crecido despacio podríamos ver montañas erosionadas sobre la planicie helada. Pero la presencia de picos y valles en las imáganes recreadas con instrumentos sísmicos sugieren que esta formación de hielo se produjo de forma rápida. El reto científico consiste ahora en determinar si este cambio dramático en el clima se produjo realmente y por qué.

Células madre para curar sordera

Una cura para la sordera utilizando células madre parece estar cada vez más cerca, ya que unos científicos británicos de la Universidad de Sheffield han logrado recrear en un laboratorio las células de las microscópicas vellosidades que recogen las ondas de sonido en el oído interno y las transmiten al cerebro humano.

Si un paciente ha perdido las células ciliadas, podrían ser sustituidas por estas y recuperar la audición.

“El problema con la sordera es que las células ciliadas sólo se producen durante las etapas de desarrollo”, aseguró Marcello Rivolta, quien dirigió el estudio.

“Si estas células se pierden durante la etapa adulta, es imposible regenerarlas. Así que lo que hicimos fue volver a esas etapas iniciales de desarrollo en el embrión para identificarlas, aislarlas y multiplicarlas en el laboratorio”, dijo el científico.

De momento, la primera fase del proyecto ha sido un éxito, pero ahora deben comprobar con animales si las células creadas logran recuperar las funciones auditivas

Descubren el planeta extrasolar más pequeño


Si hace un tiempo anunciábamos lo mismo con un planeta tres veces mayor que la Tierra, apenas 7 meses después se encuentra otro con tan sólo dos veces el diámetro de nuestro planeta.

Astrónomos del Instituto de Astrofísica de Canarias y gracias al satélite CoRoT, han descubierto este planeta fuera del sistema solar, con una temperatura entre 1.000 y 1.500 grados centígrados y con una superficie seguramente rocosa o cubierta de lava.

Este nuevo planeta, que tiene un diámetro aproximadamente el doble que el de la Tierra, recibe el nombre de CoRoT-Exo-7b, y está muy cerca de su estrella principal, por eso su temperatura es tan elevada.

La detección se produjo por medio del método de tránsito, es decir, mediante el ligero oscurecimiento del brillo de la estrella cuando el planeta pasa regularmente delante de ella, cada 20 horas terrestres.

La mayoría de los más de 330 planetas descubiertos hasta ahora son gigantes compuestos sobre todo de gas, como Júpiter y Neptuno, y en el caso de CoRoT-Exo-7b su densidad aún no ha sido determinada, aunque podría tratarse de un objeto rocoso, como la Tierra, o bien estar cubierto de lava líquida o tratarse de una mezcla de ambos tipos.

Identificar la naturaleza de este planeta requerirá muchas investigaciones futuras, y es posible que deba considerarse este descubrimiento como el comienzo de la astronomía exoterrestre, indicó Hans Deeg, investigador del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC) y miembro del equipo del descubrimiento.

Identifican por primera vez dos agujeros negros que orbitan entre sí


Según han señalado astrónomos estadounidenses y ha publicado la revista Nature, dos inmensos agujeros negros parecen estar orbitando el uno en torno al otro, en una especie de “baile cósmico” en el centro de una galaxia lejana.

Se trata de dos agujeros negros supermasivos, que son objetos celestes con una gran atracción gravitacional, y se encuentran atrapados en una órbita a unos 5.000 millones años luz de la Tierra.

Estamos ante la mejor evidencia hasta la fecha de dos agujeros negros que se orbitan mutuamente, y algunos astrónomos aseguran que en un futuro podrían fundirse en un agujero negro de mayor tamaño.

El menor de los dos agujeros negros posee una masa 20 millones de veces mayor a la del sol, mientras que el más grande posee 1.000 millones de veces la masa solar. Orbitarse entre sí les lleva cerca de 100 años y están ubicados a unas 3/10 partes de un año luz el uno del otro.

Hallan agua salada en estado líquido en Marte

Científicos estadounidenses aseguran que el agua en forma líquida descubierta junto a una de las patas del “Phoenix” es salada y podría haber más en otros sitios del planeta.

“Un gran número de pruebas físicas y termodinámicas independientes muestra que el agua salina puede ser común en Marte”, aseguraron, y estan muy contentos ante la primera vez que se ha detectado y fotografiado agua líquida fuera de la Tierra.

El agua líquida es un ingrediente esencial para la vida. Este descubrimiento tiene implicaciones importantes para muchas áreas de la exploración planetaria, incluida la habitabilidad de Marte. Hasta ahora los científicos creían que el agua existía en Marte solo como hielo o vapor debido a las bajas temperatura y presión atmosféricas en el planeta.

Pensaban que en ese ambiente el hielo podía sublimarse o vaporizarse, pero no creían que podría derretirse. Las fotos de una de las patas del aparato muestran gotas de rocío durante el verano marciano.

Sobre la base de la temperatura de la pata y la presencia de gran cantidad de sales percloradas detectadas en el suelo los científicos creen que las gotas fueron muy probablemente de agua salina líquida y fango que salpicaron a la cápsula espacial.